Una parejita romántica

- Mi amor, quieres casarte conmigo...?
- Ay, querido, no estaba a espera de este pedido... (caramba, pensé que nunca se decidiría...!) jijiji...
Esta deliciosa parejita joven es un encargo muy especial, que va a viajar prontito para el País Vasco, donde ya tienen a su espera una preciosa terraza con un juego de sillones y una mesita con champagne y copas para celebrar el pedido de mano.

Ella es una muñeca semi-fija, tiene apenas movilidad en las piernas para adaptarse a la altura del asiento. Está muy sorprendida, feliz y enamorada, como se puede ver a simple vista!

Tiene un vestido de gala de seda color borravino, y un chal hecho con cinta de organza en el mismo color... que me ha dado un trabajo terrible, porque la organza se deshilacha mucho, y no toma forma con facilidad...

... por lo cual opté por coserla en la parte de atrás, cruzándola por debajo de la falda, para que las puntadas queden ocultas y conserve la forma. El cabello está recogido en lo alto de la cabeza, y tiene unos pequeños brillantitos sosteniendo la coleta en forma de bucle que le cae sobre un hombro.

Los zapatos son modelados en fimo dorado, y tiene unos pendientes simples y un collar también dorados.

La carterita de fiesta está modelada en fimo, y tiene un strass como adorno.

Un detalle del peinado, que es una torzada simple, cosida donde sale la coleta, con los brillantes tapando la puntada que lo sostiene.

El novio tiene un smoking negro, cuyo modelo saqué de una revista. La faja y el moño están hechos en cinta de seda azul-celeste, y la flor que lleva en la solapa está hecha con la misma seda del vestido de ella, lo que me pareció un detalle romántico.

Tiene zapatos modelados en fimo negro, y el corte del traje es bastante simple.

Una vista de la parte posterior, que está cortada a derecho.

Y una toma más cercana de los detalles de la ropa, y del estuchecito (hecho en fimo) con el anillo que confeccioné con un pequeñisimo aro de metal dorado, pegándole encima un pequeño brillantito de bijouterie.

Como la feliz pareja no va a viajar solita, les presento a los otros dos integrantes del encargo: una cocinera que vino al taller para ser reparada después de sufrir un pequeño accidente, y un antiguo muñeco que no se vendió, y que ahora fue "reconvertido" en mayordomo y va a servir la cena para estos felices novios.